NUESTRA HISTORIA

Ver el nacimiento de una Parroquia y sobre todo participar en la construcción de un templo dedicado a Nuestra Señora del Carmen, con todas las actividades espirituales y materiales que conlleva, ha significado una bendición para los fieles de las 5 colonias de oriente, que por 50 años, han sido testigos de su orígen y transfomación, guíados por los sabios y pastores con que Dios ha privilegiado a este sector.

En el año 1959, el presbítero Jesús de Alba, párroco del Sagrado Corazón de Jesús, recibió los títulos de propiedad del terreno, que fue donado por la Señora “Mona” Obregón. Posteriormente en 1961 el primer Obispo de la Diócesis EXMO: Señor José de la Soledad Castañeda, colocó la primera piedra integrándose un comité que trabajó arduamente bajo la asesoría de su primer sacerdote el Pbro. Ramón Alberto Durazo Moreno, al cabo de los 5 años se vió cristalizada la primera etapa de la construcción. Previamente se había acondicionado un Oratorio y una pequeña casa parroquial, en la esquina de las calles: Chávez y Sahuaripa de la Colonia Rosales, donde habitó y ofició por tres años el Padre Durazo. También es parte de su obra el nacimiento de un colegio católico llamado, San Estanislao de Kostka, dirigido por la maestra Anastasia Castrejón “Tachita”, que funcionó por 12 años llegando a tener una población escolar de 300 niños.

 

 

En un terreno donado por el Sr. Remigio González, se inició la construcción de la Casa del Buen Pastor, con un patronato dirigido por el Profesor Carlos Rivera que en incansable labor han reunido la parte de capital correspondiente a la obra. Es de justicia mencionar que para algunas de estas construcciones se ha contado con el apoyo técnico y económico de los gobiernos municipales.
En septiembre de 2009 el Señor Obispo Don Juan Manuel Mancillas Sánchez, de gratísima memoria, en una solemne ceremonia dio posesión de la parroquia al Pbro. Sergio Hugo Trujillo Durazo, que a la fecha en corto tiempo y continuando con la incansable labor de su antecesor, ha modernizado y embellecido la construcción material, con estacionamiento exterior, el atrio lateral, clima artificial para los salones de catequesis y demás áreas que carecían de este imprescindible servicio mejorando sanitarios, oficina, sacristía, pero sobre todo dando atención humana, fraterna, paternal y solidaria a los fieles y grupos parroquiales, al consejo, al Colegio Santa Fe, comunidades, y congregaciones que responden con la asistencia a las misas de sábados y domingos, que llenan totalmente la iglesia con gran devoción e interés, respondiendo siempre al llamado de su pastor.
Ante tanto amor y misericordia de Dios Todo  Poderoso, los fieles de la parroquia elevamos nuestra oración de gratitud al Creador, por tantas bendiciones a este sector al cual se suman tres colonias más, Fraccionamiento Santa María y  Frac. Herradura 1 y 2.
Nuestros Obispos siempre han tenido espacio de su valioso tiempo, para las visitas pastorales así hemos convivido de cerca con los Excelentísimos:

Mientras tanto la parroquia crecía en lo espiritual, integrándose los fieles a grupos como el movimiento familiar cristiano, la Legión de María, la Vela perpetua, los cursillos de Cristiandad, sin descuidar el catecismo infantil.
A los 5 años el padre Durazo, fue cambiado a Cd. Obregón, sustituyéndolo el Pbro. Pedro Aldana, a cuya incansable labor espiritual se sumó la creación de la Casa Hogar Claret, para niñas huérfanas o desamparadas, este sacerdote Claretiano estuvo auxiliado por varios padres y dos religiosas cuya labor de evangelización en las colonias y comunidades, pronto dio grandes frutos.
Cumplidos 5 años, regresó a su orden religiosa ocupando su lugar el Pbro. Salvador Flores y en la vicaria el padre Víctor Quezada que dedicaron tiempo especial a la niñez y juventud, iniciándose la construcción de salones parroquiales. El Pbro. Javier Serratos, también tiene un lugar en la historia de la parroquia.
Con el Sacerdote Miguel Agustín Durazo, de gran nobleza y múltiples carismas se amplió la atención a las comunidades y a la Legión de María, a él, le sucedió el padre Mario García Icedo, cuya estancia fue breve. En 1991 el Señor Obispo Don Vicente García Bernal, dio posesión del Carmen, al Pbro. Ramón Corona Martínez, que por más de 17 años de incansable y creativa labor hizo posible la ampliación de la nave principal, la construcción del atrio, las nuevas oficinas, la capilla del Santísimo, aportó la parte correspondiente para la pavimentación de la calle Cruz Gálvez, en 1996 se construyó el retablo del presbiterio y dos años más tarde las criptas, se encementó el estacionamiento interior y la construcción de la cancha y las jardineras. Dio especial atención a los jóvenes formado los grupos Kairos que a la fecha llevan 50 retiros espirituales, se formó el consejo parroquial, y dio impulso al arte con el grupo “Gordoskis”, con la presentación de festivales cuyas utilidades eran destinadas al asilo de ancianos “San Juan”.

 

 

 

 


Don José de Soledad Torres Castañeda +
Don Miguel Gonzales Ibarra +
Don Luis Reynoso Cervantes +
Don Vicente García Bernal
Don Juan Manuel Mancilla Sánchez
Don Felipe Padilla Cardona
Para concluir con esta reseña, recordamos a otros sacerdotes que en su tiempo han auxiliado a los Presbíteros: Padre Margarito, Mauro Ríos, José Luis Balderas, Rene Ochoa, José Bracket, Juan de Dios Vásquez, Loreto Córdova, Demetrio Moreno, Felipe Gonzales y Antonio Robles Manzanero.

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